La Torre del Reloj de Venecia: Por qué vale la pena visitarla

La Torre del Reloj de Venecia es uno de los edificios más singulares de la ciudad y, sin duda, vale la pena visitarla. Se alza sobre un arco en la Plaza de San Marcos, marcando la entrada a la plaza desde las Mercerie, una calle histórica donde antiguamente se vendía de todo y que hoy es uno de los mejores lugares para comprar recuerdos.
La construcción de la Torre del Reloj de Venecia se remonta a 1493, cuando el Senado decidió encargar al maestro Carlo Zuan Rainieri de Reggio Emilia la creación de un nuevo reloj.
Lo que hace única a esta reloj astronómico es su sofisticada maquinaria, que representa la principal razón por la que vale la pena visitar la Torre del Reloj de Venecia – pero no es la única.
Por qué vale la pena visitar la Torre del Reloj de Venecia
Durante la visita, tendrás la oportunidad de comprender cómo funciona el increíble mecanismo del reloj. Se compone de un complejo sistema de engranajes que regula las manecillas del reloj, las figuras de los Moros en la parte superior de la torre y la procesión de estatuas de madera, que representan a los Reyes Magos y al Ángel con la trompeta. Estas figuras emergen de las dos pequeñas puertas sobre el reloj, seguidas por la estatua de la Virgen María, pero solo el día de la Epifanía.
Originalmente, esta procesión se realizaba cada dos horas, pero para preservar la delicada maquinaria, se redujo la frecuencia.
El reloj en sí es una obra de arte que hace que la visita a la Torre del Reloj de Venecia sea realmente especial. Se compone de dos paneles giratorios que muestran las horas y los minutos – estos se instalaron en 1858 para facilitar la lectura de la hora.
La esfera principal muestra los signos del Zodiaco con sus respectivas constelaciones, así como los nombres de los meses y los días. La manecilla de la hora es un rayo dorado conectado a la figura del Sol, mientras que en el centro hay un disco interior con la Tierra y la Luna, que gira para mostrar las fases lunares.
En la parte superior de la Torre del Reloj hay dos estatuas de bronce que representan a un Moro joven y un Moro anciano, simbolizando el paso del tiempo.
Estos Moros, llamados así por el color oscuro de la pátina del metal, están situados a los lados de la gran campana en la cúspide de la torre. Cada día, a cada hora, golpean la campana con sus grandes martillos, tal como lo han hecho desde el día en que fueron instalados.
Dato curioso: Los venecianos estaban tan orgullosos de su sofisticado reloj que, según una leyenda, dejaron ciegos a los constructores para que nunca pudieran replicarlo en otro lugar.
Duración de la visita y entradas para la Torre del Reloj de Venecia
La visita dura aproximadamente una hora y, lamentablemente, no es accesible para todos, debido a las escaleras estrechas dentro de la torre.
En particular, las personas con movilidad reducida no pueden realizar la visita. Tampoco es recomendable para quienes padecen claustrofobia, vértigo, problemas cardíacos o enfermedades respiratorias.
Además, no se recomienda para mujeres embarazadas, debido a los espacios reducidos y las empinadas escaleras. Si viajas a Venecia con niños, ten en cuenta que los menores de 6 años no pueden entrar, aunque hay entradas con descuento para niños de 6 a 14 años (7 euros).
La entrada general cuesta 12,00 euros y la visita debe reservarse con antelación a través de la página oficial de la Torre del Reloj de Venecia.