El gueto judío de Venecia: descubriendo el barrio

El gueto judío de Venecia: descubriendo el barrio

El gueto judío de Venecia fue el primer gueto real en Europa. Situado en el corazón del sestiere de Cannaregio, a solo dos minutos de nuestro hotel, esta vibrante zona de la ciudad aún conserva tradiciones religiosas judías e instituciones administrativas.

Una gran puerta de madera y un sottoportego marcan la entrada a una de las áreas más animadas de Venecia. Tres sinagogas y el Museo Judío pueden visitarse a través de numerosas visitas guiadas.

Si tienes curiosidad por descubrir todas las historias y secretos que hacen de este lugar un sitio tan fascinante y misterioso, aquí hemos recopilado toda la información que necesitas para visitar el gueto judío.

La historia del gueto judío

Venecia, un gran centro comercial entre Oriente y Occidente, siempre ha sido una ciudad donde diferentes comunidades culturales han convivido pacíficamente durante siglos. Desde el siglo XI, una importante comunidad judía se estableció en la ciudad, y la República de Venecia consideró necesario regular su presencia.

En 1516, la Serenísima obligó a los judíos a vivir en una zona específica de la ciudad: un área donde antiguamente se encontraban fundiciones de metal, llamadas en veneciano «géto», de donde proviene el término «gueto» para designar los barrios judíos.

Este gueto estaba cerrado por la noche, y patrullas de cristianos venecianos se encargaban de vigilarlo para evitar ataques o intentos de fuga.

Qué visitar en el gueto judío

El itinerario ideal incluye la visita a las sinagogas (schole), el Museo Judío y un paseo por las pequeñas calli del barrio. Te recomendamos comprar el boleto de 12 euros, que da acceso a tres de las cinco sinagogas, además del Museo Judío.

El pequeño pero fascinante Museo Judío, fundado en 1954, conserva valiosos objetos de orfebrería y textiles que atestiguan la importante presencia de la comunidad judía en Venecia.

Las sinagogas, el alma del gueto, fueron construidas en los pisos superiores de los edificios del Ghetto Novo. Desde el exterior, son difíciles de identificar, pero en su interior esconden auténticas joyas arquitectónicas.

Las más antiguas, la Gran Schola Alemana, la Schola Italiana y la Schola Canton, se encuentran en el Ghetto Novo («Nuevo Gueto«), mientras que la Schola Española y la Schola Levantina están en el Ghetto Vecchio («Viejo Gueto«).

Un consejo: observa bien los edificios. Aquellos que tienen cinco ventanas alineadas representan los cinco libros de la Torá, el libro sagrado del judaísmo. Esos edificios son sinagogas.

El gueto judío: datos curiosos que quizás no conocías

Al pasear por el Campo del Ghetto Novo, notarás la presencia de tres casas de empeño: la roja, la verde y la negra, probablemente llamadas así por el color de los recibos que entregaban.

La Serenísima obligó a los judíos a administrar estas casas de empeño, garantizándoles a cambio el derecho a practicar su fe y protección en caso de guerra.

Sin embargo, la República estableció una tasa de interés máxima y prohibió aceptar armas o objetos religiosos como garantía.

Si has oído hablar del personaje de Shylock, el gueto judío de Venecia es el escenario ideal de la famosa obra de teatro «El mercader de Venecia» de William Shakespeare.

El reconocido actor Al Pacino, quien interpretó a Shylock en la versión cinematográfica de 2004, asistió a la 61ª edición del Festival de Cine de Venecia, donde la película se estrenó por primera vez.

Otro dato interesante: ¿sabías que uno de los platos más típicos de Venecia, las sardinas en saor, tiene origen en la tradición judía?

Estas deliciosas sardinas fritas, marinadas con cebolla, piñones y pasas, no forman parte de la cocina veneciana tradicional, sino que fueron introducidas por la comunidad judía.

En el barrio, encontrarás restaurantes y panaderías kosher donde podrás degustar estas y muchas otras delicias judías.

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